El preso
político saharaui SalahLabsir, se encuentra desconectado del mundo exterior,
después de realizar una llamada desde la cárcel a Argelia en la que habló con su
propio dialecto hasaní. Este dialecto ha sido un obstáculo lingüístico para el
empleado de la cárcel que se encargaba de escuchar la llamada y saber el tema
de la conversación. El preso negó cambiar su dialecto a la hora de hablar.
Después de
esta llamada el preso político ha sido encarcelado en una celda individual sin
ningún contacto con el mundo exterior, y la administración de la cárcel ha
prohibido hablar con él incluso a los empleados de la cárcel. Por otra parte,
las autoridades marroquíes han permitido a un preso de los levantamientos de
Rif asistir al funeral de su padre, mientras que los presos políticos saharauis
se encuentran encarcelados en pésimas e inhumanas condiciones. SalahLabsir es
uno de estos casos, que ha sido privado
de sus derechos fundamentales.
Departamento
de Traducción y Documentación
Centro Mediático
Bentili(CMB)